Acapulco, Gro.- El diputado federal, Fermín Alvarado Arroyo, aconsejó prudencia para los políticos de su partido, el PRI, y que terminen con las descalificaciones, que en nada abonan al proyecto colectivo que encabeza Enrique Peña Nieto por la Presidencia de la República.
En el transcurso de la semana que concluye, varios aspirantes a la presidencia municipal de Acapulco se señalaron mutuamente de no ser priistas, no cumplir con los requisitos para ser candidatos y exigieron la salida de Amed Salas Justo de la dirigencia local de ese partido.
Al respecto, Alvarado Arroyo —también aspirante a la alcaldía— dijo que es prudente hacer un llamado a la responsabilidad y terminar con la descalificación, porque el propósito es no sólo que el PRI recupere la presidencia con Enrique Peña Nieto, sino que el propósito es que a México, a Guerrero y a Acapulco le vaya mejor “y no se ven muy bien los actores políticos que hacen de la descalificación su método y estrategia de trabajo”.
“Si queremos ayudar a Enrique Peña Nieto y a México a hacer de este país el país próspero y el país seguro que se merecen nuestros hijos, no se le ayuda ni al PRI ni a Enrique Peña Nieto con la descalificación”.
El legislador aseguró que estas actitudes entre priistas “si pegan a nivel nacional claro que repercute a nivel estatal y a nivel local”.
“Claro que la descalificación no abona a la unidad y Enrique Peña Nieto nos necesita a todos unidos trabajando para fortalecer el proyecto y hacer de México, de Guerrero y de Acapulco un país, un estado y una ciudad cada vez más segura y cada vez más próspera, sustentable”.
Consideró que el delegado del PRI, en funciones de presidente del CDE, Víctor Valencia de los Santos, está “haciendo su trabajo para trabajar con la gente, fortalecer al PRI, a reorganizar al partido”.
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