- Diamante, La Sabana, Puerto Marqués, Cayaco, Llano Largo y Colosio, las afectadas
- Solicitará Alvarado Arroyo un estudio a la CNA y SG para levantar obras que disminuyan el riesgo
LA JORNADA GUERRERO
Las poco más de 14 mil familias que viven en la exclusiva zona Diamante de Acapulco y en los poblados de Llano Largo, Cayaco, La Sabana, Puerto Marqués y Colosio enfrentan el riesgo de sufrir severas inundaciones en la próxima temporada de lluvias, a consecuencia de las edificaciones de unidades habitacionales en esa área suburbana por el cambio de uso de suelo que autorizó la administración municipal en 2001.
En conferencia de prensa, el diputado federal Fermín Alvarado Arroyo reveló que en los próximos días presentará un punto de acuerdo donde se exhortará a la Comisión Nacional del Agua (CNA) y a la Secretaría de Gobernación (SG) que agilice los estudios de las obras hidráulicas que se requieren en esa zona para reducir los riesgos, luego de que se edificaran numerosos desarrollos habitacionales en humedales.
“Esas zonas son susceptibles de ser inundadas y ahí se autorizaron licencias de construcción pese a la época que vivimos de cambio climático que generan fuertes precipitaciones, antes no se daba y ahora ya vemos los resultados de los riesgos. Si no se atienden estas zonas, se pueden dar desgracias mayores”, expresó.
Apremió a la CNA y SG atender con oportunidad esos puntos propensos a severas inundaciones, porque siempre se termina por aplicar fondos cuando pasan desastres naturales, como fue el caso reciente en el estado de México y áreas del Distrito Federal.
“Hay que prevenir para no luego estarse lamentando, por eso se debe prever presupuesto para hacer obras que eviten inundaciones y que se ponga en riesgo la vida de más de 14 mil familias. No queremos otro Paulina por la falta de previsión, cosas que se pueden evitar y este llamado se hace a tiempo”, aseveró.
Alvarado Arroyo deslizó que incluso se puede exigir a la CNA y SG inicien una investigación para fincar responsabilidades a la autoridad municipal que aprobó en 2001, el cambio de uso de suelo de la zona Diamante, lo que generó un incremento en obras habitacionales.
Caso estancado por el estado
Ese mismo tema, reprochó el legislador, fue presentado al gobierno del estado desde hace dos años, tiempo en el que sostuvo, no han habido avances y no se han podido fincar responsabilidades.
“Desde hace dos años se pidió al estado que se investigara a las autoridades municipales que otorgaron licencias de construcción en zonas susceptibles de inundación, que es históricamente zonas de vocación ecológica y humedales. Esperamos que se actúe y no tengamos que esperar el cambio de gobierno para tener resultados”, indicó.
Caso similar sucede a nivel federal, porque dijo que las autoridades agrarias otorgaron tierras en estas áreas inundables.
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